Lijiang y sus callecitas de cuento.

El tiempo en China se va acabando y aún queremos visitar varios lugares en la provincia de Yunnan (Lijiang, la garganta del Salto del Tigre, Sangri la, Dali y Kunming). Puesto que Kunming será nuestro aeropuerto de salida, lo dejaríamos gustosos para el final, pero necesitamos tramitar el visado de entrada a Myanmar y dentro de China solo se puede hacer allí o en Beijing. Así que desde Emei nos dirigimos a Kunming en una visita express de 12 h, tiempo suficiente para visitar el consulado, solicitar el visado, turistear un poco por la ciudad, y emprender rumbo a Lijiang. Ya visitaremos Kunming en profundidad cuando regresemos para recoger el visado y pillar el avión ;-).

A estas alturas del Blog, ya habréis notado que las ciudades no son santo de nuestra devoción y que preferimos tirar "pal monte" como buenas cabras que somos. Pero he de reconocer, que la ciudad antigua de Lijiang nos ha cautivado por completo, o por lo menos a mí.

Ciudad antigua de Lijiang desde la colina del León.

Ciudad nueva de Lijiang desde la colina del León.

Aquí hemos podido relajarnos y descansar un par de días, entre callejuelas empedradas, cruzadas por infinidad de canales y puentes,y flanqueadas por filas de casitas de madera llenas de farolillos rojos que le dan un encanto muy especial. Además, al ser días entre semana, fríos y lluviosos, no sufrimos la mega-masa se turistas chinos que nos habían anunciado en innumerables ocasiones antes de llegar.

Lo que si hemos empezado a encontrar de nuevo, son turistas occidentales (si al final, ¡se les acaba echando de menos!), y la verdad es que se agradece poder mantener una conversación fluida de vez en cuando. En este caso, dos estudiantes alemanas y un ingeniero chileno, que se alojaban en el mismo albergue, nos hicieron pasar muy buenos ratos compratiendo cenas y cervezas.

Mercado de comida de la calle Qiyi. ¡Marchando una de almejas picantes!

También hicimos un amigo muy especial aunque un poco fuera de lo habitual: Chechu. Así es como decidimos bautizar a una perrilla que nos encontramos una mañana nada más salir del albergue y que nos estuvo acompañando el día entero a lo largo y ancho de toda la ciudad antigua. Sí, lo sé, Chechu no es nombre de perra, pero no veáis como derrapaba la tía, así que fue inevitable ponerle ese nombre (para una explicación más detallada, ver en YouTube "Chechu derrape" XD).

Chechu descansando junto a Paco mientras esperamos a que nos sirvan la comida.

Paco y Chechu junto a un hombre ¡¿con un escudo de paja?

INFORMACIÓN PRÁCTICA PARA VIAJEROS

- Transporte: hay varios trenes nocturnos desde Emei a Kunming. Nosotros cogimos el que sale a las 17:16 y llega a las 9:54. Nos costó 231¥ la litera de abajo y 216¥ la de arriba. Tambien salen varios trenes nocturnos desde Kunming a Lijiang, y el que pillamos fue el de las 20:52, que llega a las 6:33. La litera de arriba nos costó 142¥. El transporte público dentro de Kunming vale 2¥ y dentro de Lijiang 1¥. Para ir a la ciudad antigua de Lijiang desde la estación de tren, hay que coger el autobús número 4 (cuesta 1¥). Para ir a la estación de autobuses de larga distancia, hay que coger el bus 8 o el 11 en la calle Minzhu.

- Alojamiento: nos quedamos en el Nirvana Backpacker. La cama en dormitorio de 4 nos salió a 35¥ por noche. El sitio está bien. Limpio, agua caliente 24h, WiFi, taquillas individuales enormes, y lavadora que se puede usar por 8¥ (capacidad máxima 7,8kg y te incluyen el detergente). Está en el n°91 de Wensheng alley, una bocacalle de la Wuxi street, como a unos 10 min de la plaza principal, bajando por la acera derecha (hay un cartelito con el nombre del hostal en la esquina indicandote que gires ahí).

Patio interior del Nirvana Backpacker

- Comida: para los viajes largos en tren, hemos comenzado a implementar el "allá donde fueres, haz lo que vieres", y nos hemos acabado aficionando a unos botes de noodles que se preparan al momento con agua caliente. Los tienen por todas partes. En el súper te cuestan 3¥, en los puestecillos callejeros 5-10¥. En Lijiang, fuimos una noche a una especie de mercado en la calle Qiyi lleno de puestecillos con todo tipo de comida y unas mesas al fondo. Este sitio sale un poco caro para comer, pero puedes probar pequeñas raciones de casi todo lo que se cocina por la zona y te lo preparan en el momento, allí mismo, delante de ti :-). Si lo que se quiere es comer barato, lo mejor es salirse de la ciudad vieja y en cualquier callejuela te puedes encontrar un montón de restaurantes locales (en la calle Jinhong, paralela a Wuxi street hay varias decenas con platos por 6-8¥). También hay un supermercado con fruta a muy buen precio en la calle Minzhu, saliendo de la ciudad antigua por la izquierda de la plaza de las ruedas de molino.

Otros: las taquillas para el equipaje en la estación de tren de Kunming cuestan 5¥. El tema del visado para Myanmar, ya os lo contaré con detalle el día que escriba sobre Kunming, que será cuando lo recojamos. Sobre Lijiang, recomendar que compréis un mapa de la ciudad antigua a cualquier vendedor callejero (te los venden incluso en la estación de tren de Kunming), pues es un auténtico laberinto y ni siquiera el Google Maps ayuda. De entrada os pedirán unos 10¥, pero regateadlo y no paguéis más de 3¥. Para subir a la colina del león en Lijiang, la entrada cuesta 15¥.