Negros sobre ruedas

Ya os contamos a nuestra llegada a Filipinas que nuestra idea era la de #2- Recorrer el máximo número de km sobre dos ruedas, con la intención de alquilarnos una moto en cada isla que visitásemos y simplemente "tirar millas".
 
En la isla de Panay comenzamos a dudar si podríamos llevar a cabo nuestro plan, pues no conseguimos encontrar ningún sitio donde nos alquilaran una moto. Visto esto, y lo molones que eran los triciclos que abarrotaban las calles, entablamos negociaciones con varios particulares para comprarnos uno, y pasar así a recorrer el país no sobre dos ruedas, sino sobre tres ;-)

triciclos filipinos

Como bien habréis deducido los que seguís el viaje por twitter, nuestra empresa resultó frustrada. No fue la causa la falta de vendedores, sino los trámites burocráticos y las dificultades que nos aventuraban los locales por el hecho de viajar dos extranjeros en un triciclo con matrícula de una isla alrededor de otras islas diferentes a la del origen del vehículo.

Por suerte, en la isla de Negros sí conseguimos alquilar una moto, así que abandonamos por unos días los mochilones, y partimos a la aventura con el mínimo equipaje que nos cupo en las mochilas pequeñas.

Nuestra motillo siempre lista para la aventura

Nos tiramos siete días recorriendo la isla, por la costa y por el interior, realizando un total de casi 1000 km. Ésta fue la ruta:

• Día 1 (carretera de costa): Dumaguete - Dauin - Malatapay - Zamboanguita - Siaton - lago Balanan - Bayawan

útiles de pesca en una playa cercana a Dauin

• Día 2 (carretera de costa): Bayawan - Hinoba-an - Punta Ballo - Sipalay

se aproxima una tormenta a Sipalay :-s

• Día 3 (carretera/camino de montaña y después carretera de costa): Sipalay - Katolohan - Candoni - Caningay - Kabankalan - Hinigaran - Pontevedra - Valladolid - Bago - Bacolod

cancha de baloncesto en mitad de la montaña

• Día 4 (ciudades y carretera de costa): Bacolod y Silay

dos de las 31 "ancestral homes" de Silay

• Día 5 (carretera/camino de montaña y después carretera de costa): Bacolod - Murcia - Don Salvador Benedicto - las chocolate hills - Quezon - Tagbino - Bagawines - Molobolo - Calamba - Guihulngan

al fondo las chocolate hills

• Día 6 (carretera de costa): Guihulngan - Ayungon - Bindoy - Bais city - Tanjay city - Sibulan - Dumaguete

árbol de Navidad gigante en la plaza de Bais city

• Día 7 (ciudad y carretera de montaña): Dumaguete y Twin Lakes

Lago Balinsasayao

Tuvimos la moto un día más, en que contábamos con haber ido a visitar Valencia, las cascadas de Casaroro y el Forrest Camp, pero al final ese día lo empleamos en otra cosa que os explicaré en otra ocasión ;-)

Durante esos siete días estuvimos más que nunca en contacto con la gente local y disfrutando de los paisajes y el clima de esta isla (en general, bastante similar a la isla de Panay).

A lo largo de la carretera, eran habituales las vistas de pequeños pueblos, compuestos de casitas hechas de bambú, caña y hoja de palma principalmente. Adyacentes a las casas solía haber pequeños comercios familiares o "stores" donde se vendían siempre los mismos productos (bebidas, snacks, jabón, champú, tabaco, tarjetas de recarga del movil, etc). Ah! y también eran frecuentes los negocios de reparación de neumáticos, llama mucho la atención que se vean tantos!

viviendas típicas a lo largo de la carretera

negocio de reparación de neumáticos

Los pueblos algo más grandes, ya empezaban a tener iglesia y colegio. En el momento en que podías encontrar "plaza", con sus mercadillos, y "casinos callejeros", así como farmacias o cajeros automáticos, entonces y sólo entonces podías concluir que estabas en una ciudad ;-)

farmacia en Dumaguete

En cuanto a los paisajes naturales, se ve mucha palmera cocotera en la zona de costa. Las playas por lo general son pequeñas y no siempre aptas para el baño. Las mejores zonas costeras, cómo no, suelen estar "ocupadas" por resorts, donde lo habitual es que te cobren por acceder a la playa. También se ve muchísima caña de azúcar, pues es fuente de sustento de muchas familias.

palmeras y caña, el día a día en el paisaje

costa oriental de Negros

En el interior de la isla, el paisaje es algo más variado. Sobre todo cuando se asciende en altura. La isla ofrece montañas, lagos y cascadas, zonas de terrazas de arroz, e incluso unas pequeñas chocolate hills que al menos en esta época del año no parecen muy de chocolate...

paisaje de montaña

terrazas de arroz

En una semana se puede ver mucho, aunque es cierto que nos quedaron zonas de la isla sin explorar. Aún así, yo estoy más que satisfecha. Y a decir vedad, no sé si podría haberle dedicado ni un minuto más a esa moto, que a pesar de estar nueva, parecía que tenía la negra. Dos culos planos, una quemadura en la pierna, rasguños, cortes y moratones varios han sido el balance final de tortuosos caminos de cabras, ciudades de tráfico absolutamente loco y condiciones meteorológicas no siempre favorables, que una ocasión nos hicieron terminar embarrados hasta las orejas, pero dando gracias de no haber acabado como este camión!

¡A ver quién saca a éste ahora!

INFORMACIÓN PRÁCTICA PARA VIAJEROS

- Transporte: desde Iloilo (isla de Panay) cruzamos en barco rápido a Bacolod (isla de Negros) por 240 PHP por persona, tardando 1h30'. Hay varias compañías que cubren la ruta, con diferentes horarios. También hay barcos lentos (algo más de tres horas) por un precio más económico.
El jeepney del puerto de Bacolod a la terminal sur de autobuses nos costó 20 PHP.
El autobús de Bacolod a Dumaguete salió por 260 PHP por persona y tardó unas 6h30' (Ceres Bus Line). Éstos salen con mucha frecuencia si son sin aire acondicionado (va con las ventanas abiertas y no se va mal). Solo a determinadas horas tienen servicio con aire acondicionado (315 PHP por persona).
En Dumaguete alquilamos una moto (Honda wave 100 en perfectísimo estado - tenía solo unos 6000 km - con 2 cascos - a estrenar -) durante 8 días por 1750 PHP. Se la alquilamos a Jason (movil 09155519156), que tiene el negocio en la calle Perdices muy cerquita del cruce con la calle Santa Rosa, en un portón de garaje bajo este cartel:

El precio de la gasolina varía de pueblo en pueblo, aunque dentro del mismo pueblo suele ser el mismo precio en cualquier gasolinera. En las fechas en que nosotros recorrimos la isla, el precio del litro variaba entre 55 y 59 PHP.

- Alojamiento: en Dumaguete nos quedamos en OK Pensionne House (495 PHP por habitación doble - interior- con baño privado y aire acondicionado) que está en la calle Santa Rosa. Bastante normalito tirando a cutre. Con WiFi en la recepción.
A la vuelta estuvimos en el Coastal Inn (Flores Ave., tfno.(035)225-9501, 422-9771), que queda a dos minutos del puerto (hacia el norte). Pagamos 380 PHP por habitación doble (exterior y con mosquitera en las ventanas), con baño privado, TV y ventilador. Tenía WiFi aunque casi nunca funcionaba. 
En Bayawan nos quedamos en Casa Rosario Pension House, en la calle Claro M. Recto. Nos costó 500 PHP en habitación doble (interior) con baño privado, ventilador y TV. Habitación amplia y limpia; con decoración de la época de mis abuelos ;-). Sin WiFi.
En Sipalay nos quedamos en Manna V Pension House, en la calle Quirino (movil 09228937419-20), por 200 PHP la habitación doble (exterior y sin mosquitera en las ventanas), con ventilador. El baño era compartido. Cutrillo, pero por ese precio no se puede pedir más. Sin WiFi.
En Bacolod, fuimos de nuevo a Manna Pension (3 Jasmin San Sebastian street), que lo lleva la misma familia que el de Sipalay, aunque este está muchísimo mejor. Nos hicieron descuento por venir de Sipalay y pagamos 400 PHP (en lugar de 500 PHP) por una habitación doble (interior) con baño privado, TV y aire acondicionado. Con WiFi. Se trata de una casa familiar donde alquilan un par de habitaciones, así que allí estuvimos la mar de a gusto, con su salón, su cocina, etc. La moto nos dejaron meterla en el jardín, pues se ve que allí no es seguro dejarla en la calle.
En Guihulngan nos quedamos en Mr. Tiu House (calle Larena, cerca de la iglesia protestante; no tiene cartel). Teléfono para reservas 09232788668 o 09174514823. La habitación doble (exterior y con mosquitera en las ventanas), con baño privado y ventilador, nos costó 400 PHP. Muy amplia y luminosa.

- Comida: por toda la isla, en cualquier pueblo o ciudad, e incluso en medio de la carretera, se pueden encontrar "eateries" donde comer por (20-50 PHP). En las ciudades siempre suele haber de estos eateries en los mercados o sus cercanías. Por las noches además es frecuente que en las plazas monten puestecillos callejeros de pinchos de carne, perritos y/o hamburguesas. También se encuentran panaderías a patadas en todos los pueblos donde venden bollería (desde 1-5 PHP/unidad) y pan (normalmente de molde).

- Otros: el museo de Hofileña en Silay cuesta 50 PHP por persona (la mitad con carnet de estudiante). La entrada a los Twin Lakes cercanos a Dumaguete cuesta 100 PHP por persona más 12 PHP por la moto.
Se recomienda llevar el carnet de conducir internacional, pues a nosotros nos lo pidieron en un control un poco antes de llegar a Dumaguete.

Isla de Panay II: ¿Navidades en Iloilo?

Como ya he mencionado anteriormente, Filipinas fue colonia española en el pasado, y una de las consecuencias de aquella época colonial ha sido que la religión mayoritaria en este país sea la Católica. De modo que ¡aquí celebran la Navidad! :-).

En nuestra casa, la Navidad, y más concretamente la Nochebuena, la pasamos siempre en familia. Eso quiere decir que nos juntamos todos (hermanos, padres, primos y tíos) en casa de nuestros abuelitos (¡un beso enorme para ellos! Elvira, no te olvides de leerles ésto). En total solemos rondar las treinta personas durante la cena, que normalmente va seguida de la entrega de regalos del "amigo invisible".

Ya que este invierno nos íbamos a perder la única reunión familiar del año, y que en este país nadie falta a esta celebración, decidimos que nos teníamos que "buscar" una familia postiza para la noche del 24 de Diciembre, jeje. En Kalibo conocimos a una con la que nos hubiese encantado pasarla, pero aún faltaba una semana para esa noche y no queríamos estar tanto tiempo en esa ciudad. Hicimos cálculos, y concluímos que para esa fecha estaríamos en Iloilo. Así que decidimos tirar de couchsurfing.
 
Contactamos así con un chico Filipino que accedió a alojarnos en su casa por dos días y tres noches, incluyendo la del 24 de Diciembre. Y con toda nuestra ilusión, nos encaminamos a Iloilo.

Una vez allí, el chico nos pareció una persona simpática y agradable. Nos enseñó el municipio donde vivía (Cabatuan, a 20 min en jeepney de Iloilo) y nos llevó al restaurante que allí tiene su familia. Estuvimos charlando largo y tendido. Bebiendo cervezas y comiendo ostras. Como ese día habíamos llegado tarde, decidimos postponer nuestra visita a Iloilo para el día siguiente y nos fuimos todos a dormir. No sin antes pasar por caja, donde ¡oh, sorpresa! nuestro hospitalario anfitrión nos incluyó todas sus consumiciones en la cuenta (que no fueron pocas). En cualquier otra circunstancia, nos habría parecido normal, al fin y al cabo nos está alojando en su casa. Pero tratándose de su restaurante, donde habitualmente no abona sus consumiciones, nos pareció un detalle un poco feo. Por supuesto pagamos sin rechistar y decidimos no darle mayor importancia. Disfrutemos de lo que hemos venido a hacer aquí - pensamos - mezclarnos con la gente local.

Al día siguiente, nuestro anfitrión nos propuso ir a pasar el día a la isla de Guimaras, a quince minutos en barco desde Iloilo. Cuando llegamos al Puerto nos dijo que no llevaba metálico, que si podíamos pagarle sus gastos. Of course! De todos modos, pensábamos invitarle. Contratamos un triciclo con conductor por todo el día (derroche no apto para mochileros), y nos dedicamos a recorrer la isla. Ésta tiene que ser muy bonita, aunque el tour que nos hizo nuestro anfitrión nos dejó con la sensación de no haber visto apenas nada. Sólo el faro de Dolores y la playa que yace a sus pies se salvaron. Porque lo que es el resto... nos llevó a la "smallest plaza" (con el nombre lo dice todo, no hay mucho que ver allí), a un museo que estaba cerrado, a un montón de tiendas de souvenirs (aquí es cuando empezamos a sospechar que nuestro nuevo amigo era un "comisionista" encubierto) y a un resort donde te cobraban entrada para "disfrutar" de un trocito de playa minúsculo, horrible y megamasificado. ¡Será por playas! Las hay a patadas en toda la isla, mil veces mejores que ésta, sin gente y gratuitas (aquí fue cuando nos convencimos de que estaba sacando tajada de todo el sin sentido de tour que estábamos haciendo).

Y lo terminamos de confirmar cuando una ancianita que vendía agua, le dijo a nuestro amigo que cada botella costaba "seis" (recordad que aquí usan los números en español, vestigio de la época colonial) y tras contestarle algo nuestro amigo en su idioma, se dirigió a nosotros pidiéndonos "ten each".

Nosotros posando en la "smallest plaza"

Curiosidades de lo que se podía encontrar en alguna de las tiendas de souvenirs

el viejo faro de Dolores

interior del viejo faro

A media tarde cruzamos de vuelta a Iloilo, donde nos íbamos a reunir con varios amigos de nuestros anfitrión, pero no se presentó ninguno. Fuimos a cenar y después a ver el ambiente nocturno, hasta que al final regresamos a casa. Por supuesto, fuimos pagando tanto nuestros gastos, como los de nuestro guía, que no tenía metálico ni para pagarse el jeepney (7 php, equivalente a 0,13 €). Eso sí, para pararse a comprar tabaco nunca le faltó...

playa junto al faro. Esta sí nos gustó :-) (la del resort era tan cutre que no hicimos ni fotos)

Ya habíamos decidido que al día siguiente nos marcharíamos, cuando esa noche antes de dormir, nuestro anfitrión nos propuso un plan para el día siguiente. Podíamos madrugar y hacer una pequeña caminata hasta una granja cercana, elegir allí un pollo, que nos lo mataran y luego nosotros hacerlo a la parrilla para comérnoslo. El plan sonaba bastante bien. Comenzamos a dudar...

¿Y si le damos otra oportunidad y nos quedamos?... aunque éste es capaz de volvernosla a liar... ¿y por la noche qué? Mañana es 24, y en ningún momento ha mencionado que vaya a celebrar la Nochebuena en familia y mucho menos que vayamos a estar invitados... ¡manda narices que con toda la buena gente que nos hemos encontrado en una semana en Filipinas, hayamos ido a dar con el único "pieza" precisamente con couchsurfing y por Navidad!... si es que ¡nos lo tenemos merecido!, por idiotas... nos tendríamos que haber quedado en Kalibo, con aquella familia tan encantadora... en fin...

Debatimos durante unos minutos y al final concluímos que como no hay dos sin tres, y mejor estar sólos que mal acompañados, al día siguiente cogeríamos los bártulos y cruzaríamos a la isla de Negros. Y eso hicimos. No sin antes vivir una última "extravagancia": cuando nos estábamos despidiendo, nuestro querido amigo nos pidió amablemente si podía quedarse una fotocopia de nuestro pasaporte (para ponerlos en un cuadro, dijo ¿? o_0). ¿Perdona? ¡Claro que no! ¡Ese documento es muy personal!. Mira que no me gusta desconfiar de la gente, pero después de lo visto, ¿qué podría esperar sabiendo que llevaba un negocio de compra-venta online?

El caso es que nos levantamos muy temprano ese día y tras dos jeepneys, un ferry, otro jeepney y un autobús, llegamos ya oscureciendo, a la ciudad de Dumaguete. Y fue allí donde pasamos la Nochebuena. Los dos sólos (bueno, con nuestro amigo San Miguel pilsen), sentados en un restaurante "bien" y descojonándonos de la risa al rememorar los "grandes momentos" de los últimos dos días.

¡¡¡Feliz Navidad a todos!!! (Museo Hofileña, Silay city :-p)

INFORMACIÓN PRÁCTICA PARA VIAJEROS

- Transporte: entre San Jose e Iloilo hay autobuses cada 20 minutos (Ceres bus line) que tardan unas 2h30'-3h y cuestan 90 php. Los jeepneys en Iloilo cuestan a partir de 7 php dependiendo de la distancia. El barco a Guimaras cuesta 14 php por trayecto.

- Alojamiento: hicimos couchsurfing y nos quedamos en casa de Gerry, en Cabatuan (al norte de Iloilo).

- Comida: las ostras que sirven en "Samurai tabalahan" (al otro lado de Smallville) están para chuparse los dedos. El menú en este sitio es amplio y variado. Precio medio.
En Guimaras, hay un lugar donde te sirven pizza de mango y que recomiendo probar (los mangos de Guimaras son famosos por ser considerados los más dulces de Filipinas). No me apunté el nombre ni la localización, pero todo el mundo lo conoce, basta con preguntarle a algún local.
Foto 2590.- Pizza de mango ;-)

- Otros: el alquiler de un triciclo durante todo el día con conductor en Guimaras nos salió por 900 PHP. No negociamos el precio pues confiamos en nuestro "guía", pero estamos convencidos de que se puede sacar por bastante menos precio; o en su defecto, moverse por la isla en jeepneys, que sale muchísimo más barato :-s

Isla de Panay I: Kalibo y San Jose de Buenavista

Ya estamos aquí. Ya hemos llegado. Estamos en Kalibo, ciudad costera del norte de Panay, y que mucha gente utiliza como aeropuerto de llegada para ir a la pequeña pero ultrafamosa isla de Boracay. Antes de que sigáis leyendo, ya os adelanto que no, no hemos ido a Boracay. No teníamos ganas de volver a Khao San Road en su versión filipina.

Siguiendo la filosofía de viaje establecida para este país, y más concretamente su punto #1, decidimos quedarnos un par de días en Kalibo, para comenzar a empaparnos de la cultura local y de su estilo de vida/gastronomía. Aquí, además, tuvimos nuestro primer intento frustrado de alquilar una moto para recorrer los alrededores, por lo que el comienzo del punto #2 tuvimos que aplazarlo.

El pueblo de Kalibo, tiene poco que ver. Quizás eso explique la ausencia absoluta de occidentales, así como las innumerables miradas de curiosidad que nos perseguían allá a donde fuéramos. Eso sí, todas ellas solían terminar en una sonrisa y un saludo, cuando no en una conversación llena de amabilidad, en la que nadie intentaba vendernos nada. ¡¡Aaaaleluya!! Al fin hemos dejado de ser "billeteras andantes" de cara a los locales, para ser "personas" sin más :)

Aprovechando esta coyuntura, decidimos tomárnoslo con calma y hacer las cosas cotidianas que cualquiera podría hacer en su pueblo: unas compritas por aquí, sesión de peluquería para Paco por allá (yo sigo evolucionando el casco, que ya pasa de pelo-playmobil), ¿a ver qué pinta tiene esta iglesia por dentro? ¡coño! ¡una boda!. Si estamos a miércoles y son las tres de la tarde... ¡ah! ¿que somos bienvenidos? ¡Pues yo no me lo pierdo! La ceremonia fue en inglés (este país es un lujo, todo el mundo lo habla) y exactamente igual que cualquier boda católica en España. Se nota que fueron colonia española en el pasado... algo que se aprecia no solo en la religión, sino también en los nombres y apellidos de la gente, en los nombres de los pueblos y sobre todo en el idioma (infinidad de palabras son "adaptaciones" del español: los números, los días de la semana, los meses del año, muchas comidas, etc).

En la boda de Toni y Roda

Qué más quisieran nuestros queridos padres que estuviésemos a tan solo 5 km de Numancia (pero la soriana, claro)

Otra de las cosas que nos gusta de Filipinas, es que aquí también celebran la Navidad. Tooooodo Kalibo estaba adornado con luces de colores y algún que otro Belén. Y en la plaza del pueblo (el lugar con más ambiente) tenían un pequeño escenario con música en vivo. Eso sin olvidar a la chavalería cantando villancicos de puerta en puerta. Aquí se escucha música por todas partes :-)

Árbol de Navidad en la plaza de Kalibo

Belén en Kalibo

En San Jose, la decoración callejera era similar a la de Kalibo. Y coincidiendo con el comienzo de las vacaciones escolares, presenciamos un minifestival donde los chavales bailaban varias coreografías en el patio del colegio.

Tampoco aquí conseguimos alquilar una moto (es lo que tiene moverse por lugares poco turísticos). Por lo que poco más hicimos por San Jose: paseillos por la playa, visitilla a sus iglesias, cervecita a media tarde con un americano que lleva viviendo en el pueblo algo menos de un año, y conversaciones múltiples con los habitantes del lugar. Un pueblo tranquilo, ¡sí señor!. Esto es precisamente lo que andábamos buscando. Creo que este país no me va a decepcionar :-)

barquitos en la playa de San Jose de Buenavista

atardecer desde la playa de San Jose de Buenavista

Belén en San Jose de Buenavista

"casino" callejero en la plaza de San Jose de Buenavista

INFORMACIÓN PRÁCTICA PARA VIAJEROS

- Transporte: del aeropuerto de Kalibo a la ciudad, se puede ir en triciclo (una especie de moto con sidecar para varias personas) por 9,5 php. De Kalibo a San Jose, salen autobuses (Ceres Bus Line) a las 5:00, 7:00, 9:00 y probablemente a alguna hora más. Cuesta 100 php y tarda unas 5h.

- Alojamiento: en Kalibo nos quedamos en el Backpackers Haven Inn (calle Pastrana entre GM Reyes street y 19 Martyrs st.). Pagamos 350 php por noche en habitación doble con baño compartido. Muy limpio (estábamos solos en el lugar) y con buen WiFi. En San Jose de Buenavista nos quedamos en Madrangca Lodge, junto a la playa. Pagamos 300 php por noche en habitación doble con baño privado. Amplio, limpio y cómodo. Sin WiFi.

- Comida: en Kalibo, justo al lado del hostal hay un pequeño restaurante regentado por una familia muy agradable donde se puede comer por 40 php. Además, en las calles aledañas a la plaza hay infinidad de puestecillos de pinchos y de cazuelas, para comer por un precio similar. En San Juan de Buenavista, también se pueden encontrar este tipo de puestos (p.ej. junto al hospital). Un sitio un pelín más caro, pero que nos gustó mucho fue el restaurante Parillahan, en la calle Tobias A. Fornier, un poco antes de llegar a la plaza (platos 70-120 php; cerveza ¡30 php! :-D). Por la noche ponen música y se llena de gente que va allí a socializar, tipo bar. Además debe de ser de los pocos sitios de la ciudad que tiene WiFi.

- Otros: en Kalibo compramos una tarjeta SIM (operador SMART) por 40 PHP con 35 SMS (a móviles filipinos) gratis. Los SMS valen 1 PHP a móviles filipinos y 15 PHP a móviles extranjeros. Las llamadas salen a 6,5-7,5 PHP/min a números filipinos y a 20 PHP/min a números extranjeros. La recarga mínima son 15 PHP y se puede recargar en prácticamente cualquier puestecillo de lo que sea a lo largo y ancho de todo el país.

¡Nos vamos a Filipinas!

¡A este país sí que le tengo yo ganas! De hecho va a ser el único al que le vamos a dedicar más de un mes. Concretamente serán dos, que es lo que nos permite el visado que tan amorosamente hemos gestionado en Bangkok.

La idea inicial (aunque quizás poco realista) es visitar las siguientes islas: Panay, Negros, Siquijor, Bohol, Cebú/Malapascua, Palawan y Coron. Aunque ya veremos en qué acaba la cosa...
¿Y qué queremos hacer aquí tanto tiempo?

1.- Mezclarnos con lo locales, dejando de lado (en la medida de lo posible) los lugares más "turistificados".
2.- Recorrer el máximo número de km sobre dos ruedas.
3.- Caminatas varias a lo largo y ancho de paisajes diversos.
4.- Dejar atrás el snorkel y lanzarnos a hacer un curso de buceo como dios manda. ¿Qué mejor país que Filipinas para esto?
5.- Hacer un poquito de geocaching, que hace tiempo que lo tenemos abandonado ;-)

Y por supuesto cualquier otra cosa que se nos vaya ocurriendo sobre la marcha. Pero eso ya os lo iremos contando a medida que surja...

Ponemos rumbo pues hacia el país número 12 del viaje, y posiblemente el último de Asia :-)

INFORMACIÓN PRÁCTICA PARA VIAJEROS

- Transporte: Para volar desde Bangkok a Filipinas, hay varias compañías low cost que hacen ofertas de manera periódica, así que con un poco de tiempo y paciencia, se puede sacar un vuelo bastante baratico, oiga! Véase: Tiger, Cebú o Air Asia.
Nosotros volamos a Clark con Tiger, pero ese mismo día cogimos un vuelo a otra isla desde el aeropuerto de Manila Internacinal, a unos 80 y pico km del primero.
Para ir del aeropuerto de Clark (Diosdado Macapagal Intl Airport) al de Manila Ninoy Aquino International, tuvimos que coger tres transportes: primero un jeepney hasta la terminal DAU de autobuses (50 PHP; 15 min), allí un autobús a Pasay (114 PHP; 1h30') y allí otro jeepney hasta la entrada de la terminal 3 (8 PHP; 15 min).

Bangkok, "Race of Champions 2012" y algún que otro reencuentro más ;-)

Una vez más dirigimos nuestros pasos hacia Bangkok. Esta vez en compañía de cuatro españoles con los que compartimos mesa y sobremesa en más de una ocasión durante nuestra estancia en Tonsai.

De izda a dcha: Marina, Anna y Marc (detrás) y Edu (delante).

Para Marina y Edu, ésta sería su última parada antes de comenzar el regreso a España tras diez meses de viaje alrededor del mundo. Para Marc y Anna, sólo un punto más en su itinerario, que les había paseado ya durante tres meses por Asia y les dejaba por delante aún quince meses más de viaje.

Para nosotros, punto de salto a Filipinas y lugar donde tramitar el visado, ya que los 21 días que allí permiten de estancia con el visado gratuito on arrival no iban a ser suficiente para los dos meses que planeamos estar por ese país.

Pero además de por el visado, había otros motivos que nos habían llevado a Bangkok a mediados de Diciembre: la Race of Champions 2012 (ROC), y que allí nos íbamos a encontrar con nuestro buen amigo Daniel, al que conocimos en Nepal. Fueron estas dos cosas las que nos ayudaron a sobrellevar mejor el agobio que supone la famosa zona de mochileros de Bangkok - Khao San Road - y en especial siendo temporada alta :-s.

Aquí con Daniel. ¡¡Paco, esos deditos!! (te mereces salir movido :-p)

- Lara, ¡que van a estar los mejores pilotos de todas las disciplinas del motor! ¿cómo no vamos a ir?
Así me vendió mi hermano lo de la ROC. Y yo, que a pesar de no ser demasiado aficionada a esto de las carreras, no pude negarme y acabé comprándoselo.

el circuito en el que se competía en eliminatorias de uno contra uno.

Paco en la ROC, más feliz que una perdiz.

Yo al volante de un fórmula 1... brum brummm :-)

El evento en sí duraba tres días. El Viernes por la tarde corrían pilotos Tailandeses y luego de todo Asia. Siendo el Sábado y el Domingo cuando lo hacían pilotos de todas las procedencias: un día en equipos y al siguiente individualmente. Y allí, por supuesto, no faltó ninguna de las grandes marcas.

El Viernes sólo nos acercamos a pillar entradas para el día siguiente, pero Paco y Daniel acabaron compitiendo en un simulador que tenían montado la gente de Red Bull y nos terminaron regalando entradas para ese día. Así que para el estadio que fuimos, a hacer bulto, porque estaba prácticamente vacío. Creo que Paco lo disfrutó bastante, aunque no puedo decir lo mismo de mi. La cara de Daniel era un poema. Sobra decir que el Sábado y Domingo no volvió, jeje ;-)

Paco y Daniel compitiendo en el simulador

Yo en cambio sí volví. Miedo me daba dejar a Paco solo por allí, pues podría haberse tirado horas y horas montado en el dichoso simulador. Los de Red Bull se hicieron sus amigos, y cada día le esperaban con ganas para ver si conseguía batir el record del circuito diario. Pero mi hermano, que dejó de ser Paco, para convertirse en un paquete, solo consiguió quedar segundo los tres días consecutivos. Aún así, me recuerda con orgullo que en el circuito de Brasil se quedó a tan sólo 3 décimas de D. Coulthard, conocido piloto de F1. ¡Ah! ¡¡Y que él era el único que "pilotaba" en modo manual!!

El Sábado y el Domingo, el estadio siguió sin llenarse y la única representación española (Jorge Lorenzo) dejó bastante que desear (por no decir que dio un poco de vergüenza ajena). No fue el único que no dió la talla. Exceptuando cuatro o cinco pilotos, el resto no llegaban al nivel (desde mi inexperto punto de vista).

Pero eso lo hizo más interesante: múltiples salidas de pista, pilotos tailandeses batiendo a otros mucho más conocidos (con el consiguiente estallido de masas de la afición tailandesa, mayoría en el estadio), espectadores tratando infructuosamente de hacer una ola decente, y animadores haciendo drifting y "ceros" (¡vaya "palabros" que me enseña mi hermano!)

Jorge Lorenzo (el coche de la izda;el que va en dirección contraria) sacando el coche de la hierba tras salirse de pista durante la competición por equipos.

Otro listo que se salió de pista, llevándose la valla por delante y dejándola destrozada en medio del circuito.

 

 

Las finales sí que estuvieron entretenidas. Por equipos ganó Alemania, gracias a sus representantes S. Vettel (tricampeón de F1 con Red Bull-Renault) y M. Schumacher (el siete veces campeón del mundo de F1 y actualmente retirado). Y en la individual, sorprendiendo a mi hermano que apostaba por la hegemonía alemana, el francés R. Grosjean, piloto de la escudería de F1 Lotus-Renault, seguido del suizo Christensen (cinco veces campeón de las 24h de Lemans).

Vettel y Schumacher celebrando la victoria del equipo de Alemania.

No podría acabar este post sin hacer feliz a mí hermano (una vez más) que lleva cosa de media hora calentándome la cabeza con un pon esto, pon lo otro. Así que ahí van sus palabras literales:

Lo más interesante fue cuando en las semifinales individuales, Roman Grosjean "se meó" al Vettel y al Schumacher, que el día anterior le habían ganado en la final por equipos.

Espero que lo hayáis disfrutado tanto como él.

Yo aquí me despido, tras mi primera (y posiblemente última) "crónica deportiva"... no hace falta que me déis las gracias ;-)

Fdo: Sara, digo, Lara! :-p

INFORMACIÓN PRÁCTICA PARA VIAJEROS

- Transporte: el trayecto Ao Nang - Bangkok lo hicimos en autobús nocturno contratado en una agencia de Ao Nang por 450 thb cada uno (pick up en Ao Nang a las 16h, salida del bus a las 17:30 de Krabi, dos paradas largas con un cambio de autobús, y llegada a Khao San Rd. en Bangkok a eso de las 6:00 de la mañana).
Para ir desde Khao San Road al aeropuerto de Suvarnabhumi, cogimos el bus 60 (7 thb) hasta la parada de Ramkhamhaeng y allí cogimos el sky line airport link por 30 thb.

- Alojamiento: nos quedamos en el Merry V. Guest House (33 Chana Songkram Lane, Cha-ka-pong Rd. Tfno.+ 66 (0) 2282 9276-8) pagando 220 thb por habitación doble con baño compartido. La habitación individual salía por 170 thb. La conexión WiFi por 24h costaba 60 thb.

- Comida: la zona de Khao San Rd. y Rambuttri está llena de lugares donde comer. Hay desde carritos callejeros con Pad Thai a 20 thb, hasta restaurantes "bien" con cartas de precios astronómicos. Al final de Soi Rambuttri hay varios puestecillos con mesitas en la calle con platos a precios entre 30-60 thb.

había que probar esta marranada (gusanos y grillos) :-p

- Otros: la embajada de filipinas queda en 760 Sukhumvit Road, cor. Soi Philippines (Soi 30/1). Desde Khao San Rd. se puede llegar cogiendo el bus urbano número 2 en la calle Ratchadamnoen Klang. El coste del visado de entrada única, válido por 3 meses, permitiendo una estancia máxima de 59 días es de 1050 thb. Hay que llevar una foto, fotocopia del pasaporte y los billetes de entrada y salida en el país impresos. Tardan 24 h en tenerlo listo.