viernes, 25 de enero de 2013

¿Islas Camotes o queso gruyere?

Para seguir con la cuestión gastronómica de hace unos días (:-p), os vamos a hablar hoy de nuestra visita a unas islas con tanta cueva, que bien podrían compararse con un queso suizo, jeje: las islas Camotes.

Se trata de tres islas situadas muy cerquita de Cebú (San Francisco o Pacijan, Poro y Ponson) en las que hemos disfrutado de lo lindo. En Santiago Bay (isla de San Francisco), continuamos con los chapuzones diarios en la playa, para no perder la racha de Bohol. Pero además tuvimos la suerte de coincidir con dos parejas de españoles, agraciados con grandes dotes culinarios. Así que durante un par de noches, cenamos "en casita", a pie de playa y con un menú de lujo: barbacoa de pescado, ensalada de algas y almejas a la cazuela (siempre bien acompañado de su arrocito blanco y regado con una cerveza fresquita) ;-)

La barbacoa, la barbacoa, cómo me gusta, ¡la barbeque!
Mmmmm, estas almejas estaban ¡de muelte!
También tuvimos tiempo para recorrer dos de las islas en moto: San Francisco y Poro, que están conectadas a través de un puente sobre el manglar. En San Francisco fuimos al lago Danao, donde hicimos una sesión de kayak y visitamos una especie de mini-zoo (cuatro jaulas minúsculas con monos, serpientes, lagartos y un par de cocodrilos).

entrada al lago Danao
el foso del cocodrilo
una de las serpientes con su "medienda"
Tras el lago, llegamos a la primera cueva: la Holy Crystal Cave. Sólo por conocer al "personaje" que la cuida, merece la pena visitarla. Según contaba, la cueva era "holy" por tres motivos: 1) por la "holy water " encontrada en su interior, que es capaz de "curar" ciertas dolencias; 2) por todos los santos allí presentes en forma de estalagmita; y 3) por unos restos de huesos, que dice son humanos, del año nosecuantitos. ¡Menudo despliegue de creatividad, religiosidad y devoción en una única persona! Los ocho subniveles de la cueva y la visita de casi una hora no tiene desperdicio. Eso sí, no es apta para claustrofóbicos o rellenitos, que en muchas zonas tuvimos que ir casi reptando.

Entrada a la Holy Crystal Cave
Esta estalagmita creo que era La Virgen María ;-)
Recorriendo el interior de la cueva
Estalactitas en crecimiento
Los "dancing crystals" (vamos que brillan rollo discoteca cuando mueves la linterna) ;)
De esta cueva salimos literalmente empapados en sudor (y con decenas de picaduras de mosquito, todo sea dicho), así que nos lanzamos a la búsqueda de un lugar para darnos un bañito refrescante. Las olas en la playa de Esperanza y la invasión de algas, nos quitaron las ganas de hacerlo allí, así que nos lo acabamos dando en la segunda cueva que visitamos ese día: en Timubo Cave. Allí, a sesenta pies bajo la superficie, se abre una cueva llena de aguas cristalinas donde uno se puede bañar, ¡fue una auténtica gozada!

bañándonos en el interior de Timubo Cave
Pero ésta no fue la última cueva del día. Tras comer en la ciudad de Sanfran (como llaman los locales a San Francisco), nos encaminamos a la isla de Poro. Tratamos de encontrar las cascadas de Panganuron, pero bajaba tan poca agua por el río y había tantos mosquitos en el camino, que decidimos darnos la vuelta. Así que acabamos yendo directamente hasta la tercera cueva del día: la Bukilat Cave.

En el interior de Bukilat Cave
Ya para terminar, decidimos subir al pueblo de Altavista, al punto más alto de la isla de Poro, para captar una panorámica del lugar. De camino, tuvimos la mala suerte de pinchar una rueda, así que nos tocó "empujar" la moto hasta que encontramos un "vulcanizing" que nos la reparara. Les llevó un ratito, tiempo que aprovechó el pueblo casi al completo para pasarse a charlar con los dos extranjeros que acababan de llegar ;-). ¡Estuvo de lo más divertido!.

Nuestro pinchazo en proceso de reparación
A pesar de todo, nos alcanzó bien el tiempo para subir a lo alto, hacer un par de fotillos y regresar antes de que se hiciera de noche.

Vistas de la isla de San Francisco (con su lago Danao) desde la vecina isla de Poro
Mi hermano "jugándose" la vida para captar la panorámica (¡no mires, mamá!)

¡Cómo me han gustado estas islas! La próxima vez que vuelva a Filipinas, ¡repito! :-)

De vuelta en Santiago Bay, justo a tiempo para la puesta de sol :-)

INFORMACIÓN PRÁCTICA PARA VIAJEROS

- Transporte: desde Tagbilaran (isla de Bohol) hasta Cebu City (isla de Cebú) hay ferries rápidos y lentos, operados por varias compañías a lo largo del día. Nosotros cogimos el ferry lento de Lite Shipping Corporation de las 12:00 (tienen otro diario a las 22:30) y tarda unas cuatro horas y media. El billete sentado cuesta 210 PHP en clase economic, y 230 PHP en litera (clase standard). La tasa de puerto es 20 PHP por persona.

Para ir a las islas Camotes desde la isla de Cebú, hay que irse al puerto de Danao a coger un barco, pues desde Cebu City se ha suspendido esa ruta marítima. A Danao se puede llegar en jeepney (30-35 PHP por persona) o en bus (40 PHP, aprox. 1h), que sale de la estación norte de autobuses de Mandaue City (al norte de Cebu City). Del puerto marítimo a la estación de autobuses en taxi (con taxímetro) cuesta unos 70 PHP.

Los barcos desde Danao a las islas Camotes salen hacia Consuelo (isla de Pacijan/San Francisco) con Jomalia Shipping Corporation (180 PHP + 5 PHP de tasa de puerto) a las 5:30, 8:30, 12:00 y 17:30 (en teoría también tiene a las 10:00 y a las 21:00, pero en la práctica están cancelando estos servicios). O a Poro ciudad (isla de Poro) con Super Shuttle Ferry (100 PHP de Lunes a Jueves y 200 PHP de Viernes a Domingo + 5 PHP de tasa de puerto) saliendo a las 5:00 y a las 13:00h. El trayecto dura algo más de 2h.
Desde Consuelo a Danao hay ferries con Jomalia a las 5:30, 9:00, 14:00 y 16:00h (180 PHP + la tasa de puerto). Si algún día las olas son muy grandes (como nos pasó a nosotros), trasladan la actividad de este puerto a Carloson (o algo así; junto a la ciudad de San Francisco), donde al menos a nosotros, no nos cobraron tasa de puerto.

Para ir a Santiago desde Consuelo o viceversa, el jeepney cuesta 50 PHP por persona, o también hay motos en el puerto que te piden lo mismo (se puede bajar negociándolo y/o te llevan a 2 en una moto).
Tanto en Consuelo como en Santiago se pueden alquilar motos. Piden 500 PHP de salida pero fácilmente te bajan a 250-300 (200-250 si la alquilas varios días). Como siempre, lo mejor es alquilarla por horas, pues en la práctica sólo la usas en las horas de luz. Nosotros se la alquilamos a un chico llamado Venice (tfno. 09106237521).

- Alojamiento: tuvimos que hacer noche en Danao (isla de Cebu) pues habían suspendido el barco nocturno y no llegamos a coger el anterior. Preguntamos por allí por algún alojamiento y paradójicamente todo al que preguntamos coincidió en que no había alojamiento alguno en Danao (me sigue costando creerlo, pues no es tan pequeño) y que había que irse a las afueras donde había algunos resorts. Dejamos así nuestro destino en manos de un "triciclero", que por 30 PHP nos acabó llevando a un sitio llamado SUNRISE Beach Resort and Lodge (San Roque Tatay, tfn. 200-3487) a algunos kilómetros de Danao. La habitación se pagaba por horas, así que os podéis imaginar a qué tipo de lugar nos llevó :-s. Pagamos 500 PHP por 12h, pues cogeríamos el barco al día siguiente por la mañana temprano. No es de los mejores sitios donde hemos dormido, pero tampoco de los peores, y su precio es "aceptable" si lo comparamos con los prohibitivos resorts (preguntamos en uno de camino y nos pedían 1700 PHP por una habitación doble). Con baño privado y aire acondicionado. Sin WiFi y con decenas de gallos alrededor que no paran de cantar desde las 4 de la mañana :-s (los crían en el propio resort).

En Camotes, nos alojamos en Pagay Beach House and Resort, en Santiago Bay. Pagamos 600 PHP por noche en una habitación doble (exterior y sin mosquitera en las ventanas) con ventilador y baño compartido. Está a pie de playa y tiene unas hamacas estupendas a tan solo cinco pasos del agua cuando está la marea alta. El sitio estaba muy limpio y era muy acogedor. Sin WiFi. Nos dejaron hacer barbacoa en la terraza :-)

- Comida: en Santiago la oferta se concentra en los tres restaurantes que hay a pie de playa. Los tres tienen una carta similar en cuanto a platos y precios. Quizás el que más nos gustó fue el Pitos Sutokil. En la salida del pueblo yendo hacia Consuelo, hay una panadería y en ocasiones sirven también comida de la que se encontraría en un eatery (ollas + arroz blanco). Si se quiere hacer barbacoa, lo mejor es irse al mercado a San Francisco (se necesita moto).

- Otros: La entrada al lago Danao cuesta 15 PHP/ persona. Dentro del lago tienen una especie de mini-zoo que cuesta 20 PHP/ persona. En el lago también alquilan kayaks por 50 PHP/ persona cada 30 minutos.
La entrada a la Holy Cristal Cave fueron 20 PHP/ persona.
La entrada a la Timubo Cave fueron 15 PHP/ persona.
La entrada a la Bukilat Cave fueron 10 PHP/ persona.

domingo, 20 de enero de 2013

Dónde comer en Filipinas

Aunque en las anteriores entradas del Blog ya he ido comentando un poco las opciones de comida que uno puede ir encontrándose a lo largo y ancho de Filipinas, creo que este tema bien merece una entrada resumen que abarque todas las opciones culinarias del país.

Por orden de disponibilidad, lo que nunca va a faltar en ningún pueblo, por pequeño que sea es un eatery. Estos pequeños negocios familiares suelen ser un mostrador que da a la calle en el que se exhiben varias ollas. Las ollas contienen varios tipos de comida: cocidos de carnes (cerdo, ternera y pollo principalmente), vegetales, pescados y sopas. Además a veces tienen huevos fritos, salchichas, chorizo y noodles. Lo habitual es que la/s ración/es que uno pida se acompañe/n siempre con arroz blanco. Normalmente tras el mostrador suelen tener espacio para una o dos mesas donde sentarse uno a comer pero lo habitual entre la gente local es que pidan para llevar. Probablemente sean la opción más económica para comer, pudiendo rondar el precio (dependiendo de lo que se pida) entre 20 y 50 PHP por persona.

Típico eatery filipino

Eatery-tienda en el puerto de Tagbilaran.

Y en cada mesa, "cubito" con cubiertos en remojo, aliños varios y con suerte servilletas ;-)
Otra opción económica son los puestecillos ambulantes de pinchos de carne a la brasa o pollo frito rebozado. Estos puestos los suelen montar por la noche más que por el día y se encuentran sobre todo en las cercanías de plazas y/o mercados. El precio de los pinchos es muy barato (alrededor de 10 PHP), pero difícilmente se puede hacer una comida a base de ellos ;-)

¿Quién quiere un pinchito? ;-)
En los pueblos ya un poquito más grandes, empiezan a aparecer hamburgueserías emplazadas en unas  casetillas tipo chiringuito de playa. Aquí venden unas ridículas (y casi insultantes) hamburguesas (Paco las describe siempre como "una loncha de mortadela entre dos trozos de pan"), así como unos tristes perritos calientes. Muchas de estas casetillas están abiertas 24h, o así es cómo se anuncian, aunque las hemos visto cerradas por la noche con bastante frecuencia, jeje.

Angel's Hamburguer, en teoría abierto 24h, pero bastante chapado esa noche ;-)
También en pueblos que superen el tamaño mínimo de tres casas, se pueden encontrar lugares donde venden pollos asados enteros (pollo = manok) por unos 150-200 PHP. Se anuncian con grandes carteles donde pone lechon manok, y es que también hacen cochinillos asados (lechón) enteros, aunque suele ser por encargo. A veces pueden tener parte del cochinillo para su venta sin encargo previo.

Marchando una de pollo!
Para los amantes del dulce, es raro el pueblo en el que no tengan al menos una bakery. Lo habitual, de hecho, es encontrar varias. Todas ellas con una amplia variedad de bollería entre 2 y 5 PHP la unidad. A pesar de lo que pueda parecer, aquí no se vende pan. O por lo menos, no el concepto de pan que a nosotros nos gustaría, pues todo lo que aquí se vende es de sabor dulce. Incluido el pan de molde (que es lo más parecido a pan que se puede encontrar). No obstante, he de confesar, que a pesar de ser mucho más de salado que de dulce, ¡me he vuelto una zampabollos completamente adicta a las bakeries filipinas!.


Mmmmmmm, ya estoy salivando...
Por supuesto, Filipinas es un país que recibe muchos visitantes orientales y occidentales, así que en los destinos más turísticos y/o las grandes ciudades, no es raro encontrarse con restaurantes de otras nacionalidades. También es posible degustar comida de otros países en muchos resorts donde, además de comida local, casi siempre tienen oferta de pasta y ensaladas variadas.

Ante todo que no falte ni la tortilla de patata, ni la happy hour! ;-)
Y ya para terminar, no podemos olvidar las cadenas de comida rápida. Si alguien lo ha dudado en algún momento, que se olvide. Por supuesto que a Filipinas también llegaron McDonalds o Pizza Hut. Pero aquí las que de verdad triunfan, son las cadenas locales. Con su famoso Jollibee a la cabeza (tienen desde hamburguesas hasta platos más elaborados para comer con cuchara y tenedor - olvidaos del cuchillo, en Filipinas apenas se usa, jeje -), Inasal y algún otro nombre que mi cabeza no ha sido capaz de retener ;-)

Jollibee en la ciudad de Tagbilaran

miércoles, 16 de enero de 2013

¡Al agua patos!

Panay & Guimaras, Negros y Siquijor... A nuestra llegada a la isla de Bohol, ya contábamos con casi un mes de recorrido por un país compuesto por más de 7000 islas y del que se dice, posee algunas de las mejores playas del planeta. Y sin embargo, sólo nos habíamos bañado una vez (!!!) en el mar desde nuestra llegada... Algo estaba fallando aquí... y no era precisamente el tiempo!

Seguramente os sorprenderá escucharlo, pero ese "fallo" venía de que no habíamos encontrado esas susodichas playas paradisiacas... aunque en Bohol, al fin, se dio la vuelta a la tortilla. En todo el tiempo que duró nuestra estancia en esa isla, la verdad es que pasamos más tiempo en el agua, que en la tierra (y por qué no reconocerlo, un poco también en las nubes) ;-)

playa cercana a Anda.

arena blanca, rocas y palmeras... allí no había otra cosa

¿os hace un coffee ahí arriba? vamos p'allá

la verdad es que las vistas son de lo más relajante ;-)
Comenzamos nuestras andadas en Anda, localidad costera de la zona sureste de la isla. ¡Y nos encantó! El pueblito no era muy grande, pero tenía de todo lo que pudiera uno necesitar. Tampoco encontramos mucho turista. Extranjeros pudimos contarlos con los dedos de las manos y locales... en realidad uno no sabe muy bien si son turistas o habitantes del municipio, así que "asumimos" que aquel estupendo lugar estaba prácticamente para nuestro disfrute "en exclusividad"

las estrellas de mar fueron nuestra principal compañía cuando estuvimos en Anda ;-)

plaza del pueblo en Anda.
El panorama, en cambio, en Alona Beach (conocida como "la pequeña Boracay") fue el extremo opuesto. Tras Anda, nos dirigimos a está otra zona costera, está vez localizada en el extremos suroeste de la isla. De hecho, para ser más exactos, no estábamos en la isla de Bohol, sino en su vecina isla de Panglao, con la que se comunica a través de un par de puentes.

¿Y por qué abandonamos nuestro rinconcito de paz para cambiarlo por una zona de turismo de masas? Pues cómo ya os adelantamos al llegar a Filipinas, nuestra intención era la de aprender a bucear, y ¿dónde mejor que Alona para encontrar una amplia oferta de escuelas de buceo?. Así que allí acabamos, para sacarnos la certificación de Open Water Diver de PADI. Vamos, que ahora, ya podemos bucear hasta 18 m de profundidad :-)

Los días del curso se nos pasaron volando. En las inmersiones en mar abierto, vimos un montón de pececillos y corales, de diversas formas y colores (peces león, peces globo, morenas, nudibranquios, etc), aunque yo me las vi y me las desee para acabar de controlar mi dichosa flotabilidad. ¿Cómo se puede ser tan manta? se estuvo burlando Paco durante los tres días que duró el curso (y alguno más...). ¡Así que ya he quedado rebautizada oficialmente como "la manta raya" de la familia!

Tras el curso no nos quedamos mucho más en la zona de Alona Beach, pues el tiempo no estaba acompañando demasiado. La playa allí no estaba del todo mal, aunque cierto es que le sobraban bastantes barcos, resorts y restaurantes... quizás demasiado turístico para nuestro gusto. Pero no nos podíamos ir sin visitar dos de los "hits" de la isla de Bohol.

Solo cuando el día está gris y se acerca una tormenta, la playa de Alona se vacía de gente ;-)

En una excursión rápida con la moto, nos plantamos en el mismo día, primero en las famosas Chocolate Hills, y después en el Santuario de los tarseros.

Las Chocolate Hills vistas desde el mirador de la localidad de Carmen.
Las primeras me sorprendieron gratamente, pues las que vimos en Negros fueron un poco "decepcionantes". Además, el camino para llegar hasta allí estuvo chulo, pues vimos paisajes diferentes a lo que nos tenían acostumbradas las otras islas de Visayas.

Atravesando el bosque, de vuelta de las Chocolate Hills.
Los tarseros también estuvieron curiosos. En el centro donde fuimos a verlos, tienen hasta diez ejemplares confinados en una zona vallada, en semi-libertad. El guía nos explicó que al ser nocturnos solo se mueven por la noche, así que todas las mañanas se tira 3h (¡¡3h!!) para localizarlos antes de que abra el centro y comiencen a llegar visitantes. El resto del día viven enganchados a su rama, sin moverse, e intentando "dormir", cosa que no consiguen por el ruido que genera la presencia de los turistas. Vamos, que los pobres deben de estar "atontaos" fruto del insomnio, ya que solo descansan de 16h (cuando cierran) a 18h (cuando cae la noche y comienzan su actividad de caza y alimentación).

en la foto no se aprecia, pero el tamaño de este pequeño primate, es como el de un puño.

INFORMACIÓN PRÁCTICA PARA VIAJEROS
 
- Transporte: para ir a la isla de Bohol desde la isla de Siquijor, hay ferries desde Larena (Lite Shipping Corporation; Martes, Jueves y Domingos, de 19:00 a 22:00; 220 PHP sentados o 280 PHP en litera + 17 PHP de tasa de puerto; no venden por adelantado y se suele llenar, así que es recomendable ir temprano a sacar el billete - abren la taquilla a las 9:00-) y desde Siquijor pueblo (OceanJet; diario de 6:00 a 9:00 y de 14:30 a 17:30; por 600 PHP + la tasa del puerto).
Para coger el autobús de Tagbilaran a Anda, hay que coger un triciclo (20 PHP por persona) a la "old terminal" junto al centro comercial Island Center Mall (se puede ir en jeepney y sale más barato, pero no sé cuánto exactamente). Salen autobuses continuamente y cuestan 100 PHP por persona. Para volver de Anda a Tagbilaran, cogimos una minivan privada con aire acondicionado que te recoge en la puerta de tu alojamiento por 130 PHP. Estos servicios comienzan a las 5:30 y hay prácticamente cada hora, dejándote donde tú quieras en Tagbilaran (imagino que también te llevarán al aeropuerto). La gente de nuestro alojamiento nos lo reservaron por teléfono, así que fue muy sencillo. También se puede coger el autobús de línea normal por 100 PHP.
Para ir a Alona/Danao Beach en la isla de Panglao, cogimos un jeepney por 25 PHP/ persona. Se cogen en una calle paralela a Carlos P García, esquina con F. Rocha, a 3 min andando desde la iglesia. Para volver, ese mismo jeepney (25 PHP) se puede coger saliendo a la carretera principal en Alona o Danao y esperando a que pase. Se tarda unos 45 min en hacer el trayecto tanto de ida como de vuelta.
A las Chocolate Hills y al santuario de los tarseros fuimos con la moto, pero se puede llegar en bus y en jeepney respectivamente desde Tagbilaran.
Para alquilar una moto en Tagbilaran hay que irse a la calle Palma, donde hay varios negocios de alquiler de moto. Piden 500 PHP por todo el día. Lo mejor es alquilarla por horas, pues se consigue mucho mejor precio y se aprovecha mejor su uso. Nosotros la sacamos por 200 PHP por medio día.
Desde Tagbilaran (isla de Bohol) hasta Cebu City (isla de Cebú) hay ferries rápidos y lentos, operados por varias compañías a lo largo del día. Nosotros cogimos el ferry lento de Lite Shipping Corporation de las 12:00 (tienen otro diario a las 22:30) y tarda unas cuatro horas y media. El billete sentado cuesta 210 PHP en clase económica, y en litera (clase standard) 230 PHP. La tasa de puerto es 20 PHP por persona.

- Alojamiento: en Tagbilaran nos quedamos en el Center City Inn (3° piso del edificio Sarabia Co-Torralba; Avda CPG enfrente de una gasolinera; tfno. 412-0212 o 09302364302) donde pagamos 350 PHP por una habitación interior con ventilador y TV, con baño compartido. Sin WiFi. En este sitio, lo mismo que en la mayoría de esta ciudad, el check out no se hace a las 12:00, sino a la misma hora a la que hiciste el check in el día anterior.
En Anda nos alojamos en el J&A Travellers Inn (junto al mercado; tfn.+63-9192443250) por 500 PHP la noche en habitación doble (exterior), con baño privado, TV y ventilador (con aire acondicionado por 600 PHP). Sin WiFi.
En la isla de Panglao, fuimos a parar al Calypso Resort (philippines@gmx.net; 09187302902) que no está en la turística y masificada playa de Alona, sino en la siguiente: Danao Beach. La habitación doble (exterior y con mosquiteras en las ventanas), con baño privado, ventilador y WiFi salió a 770 PHP por noche, incluyendo una moto para movernos por allí durante el tiempo que durase nuestra estancia. El resort tiene restaurante, piscina, billar y buceo.

- Comida: como en cualquier ciudad de Filipinas, es muy fácil encontrar un eatery barato en casi cualquier calle de cualquier ciudad/ pueblo.
En Tagbilaran además, hay varias restaurantes de diversos precios en el BQ Mall (incluidos de comida rápida tipo McDonalds o Pizza Hut).
En Anda, en la parte de detrás del mercado tienen una zona de mesas con varios eateries juntos donde se concentra una gran oferta de comida local. También hay restaurantes en los resorts, en ocasiones con comida occidental.
En Alona/ Danao hay mucha oferta enfocada al turismo. Por la noche hay mucha barbacoa.

- Otros: la entrada de cine en el BQ Mall de Tagbilaran cuesta 100 PHP.
La entrada al mirador que hay en Carmen para ver las chocolate hills cuesta 50 PHP por persona.
La entrada del santuario de los tarseros, en Corella, también cuesta 50 PHP por persona.
Alona/Danao Beach (y en menor medida Anda Beach) está lleno de lugares donde se puede bucear. Lo mejor es darse una vuelta y preguntar por precios. Nosotros hicimos el curso de "Open Water Diver" de PADI por 14500 PHP en Go Scuba (Alona Beach). Lo llegamos a encontrar por 11000 PHP, pero finalmente nos decantamos por Go Scuba porque tenían instructor en español y parecía un lugar lo suficientemente grande y serio como para darnos seguridad. La verdad es que quedamos encantados con nuestra instructora, así que si vais por allí, os la recomendamos. Se llama Mayumi (que no os engañe el nombre, es española, solo que de padres japoneses ;D) y su contacto es sanomayumi@hotmail.com o 09163009121 (móvil filipino).

miércoles, 9 de enero de 2013

Atrapados en Siquijor

Cuando llegamos a la isla de Siquijor, el plan era estar cuatro o cinco días vagueando antes de  tirar para la isla de Bohol. Pero el caso fue que entre pitos y flautas, al final nos acabamos quedando ¡ocho!

Lo más sorprendente del asunto es que la islita no llega a 80 km de perímetro, y apenas tiene playas habilitadas para el baño. La ciudad más grande tendrá unos 20.000 habitantes y es que realmente hay poco que hacer por allí.

Por recomendaciones varias, nada más llegar, nos fuimos al pueblo de San Juan. Poco más de un centenar de personas vivirán allí, y aún así, por primera vez después de casi tres semanas de viaje por el país, comenzamos a cruzarnos con otros mochileros occidentales. De hecho, nos cruzamos con los primeros (y hasta el momento, únicos) españoles que hemos visto en Filipinas. Coincidimos en la guest house, donde nos adueñamos de la cocina-comedor y compartimos una cenita casera de lo más agradable.

puesta de sol desde nuestra guest house en San Juan, isla de Siquijor.
Sin embargo, no es esto lo que os quería contar hoy, sino las tres "historias" que en Siquijor nos sucedieron y que ya han pasado a alimentar nuestros recuerdos anecdóticos del viaje. Vamos allá, os las cuento una por una...

1) Saca la barrera, que viene... ¡el ratón!
Eso es exactamente lo que tuvimos que hacer nuestra segunda noche en San Juan.
Ya había pasado la medianoche. Paco jugaba a un videojuego en su cama. Yo leía en la mía. La puerta del baño (enfrente de la cama de Paco) se encontraba abierta. El silencio, dentro y fuera de la habitación, era la nota dominante en el ambiente. De repente se oyó un golpe seco de algo que había caído desde el techo del baño a su interior. Paco se levantó sobresaltado y me dijo: ¿has visto eso? ¡creo que acaba de saltar un ratón desde el techo al baño! Nos asomamos de inmediato y ¡efectivamente! Ahí estaba, un ratoncillo gris correteando nervioso hasta esconderse detrás de la papelera. Cerramos la puerta de golpe. ¿Y qué hacemos ahora? ¿cómo lo sacamos?.

Yo era más partidaria de dejarlo ahí encerrado y a la mañana siguiente hacer check out, jeje. Pero Paco, que es más valiente que yo, lo vio claro enseguida: sólo puede salir por la puerta, hay que dejarlo marchar. Así que abrimos la puerta de la habitación y después la del baño, movimos la papelera (bueno, Paco movió la papelera. Yo "observaba"  la escena subida sobre su cama. Eso sí, lo hizo con ayuda de una chancla, que es valiente, pero no tanto :-p) y esperamos a que el ratoncito saliera.

Pero parecía que al ratón le gustaba mucho nuestro cuarto, porque según salió del baño, en lugar de tirar para afuera, decidió que estaría mejor debajo de mi cama y para allá que fue... en cosa de medio segundo pasamos a ser dos los que estábamos sobre la cama de Paco ;-).

La siguiente media hora nos la pasamos tratando de "asustar" al ratón para que saliera de allí: moviendo la cama, tirándole las chanclas, saltando de silla en silla, descojonándonos de la risa, con algún que otro "gritito" nervioso cada vez que se decidía a salir para volver inmediatamente a esconderse. Os podéis imaginar el jaleo... lo que no sé es cómo no despertamos al vecindario entero. El caso es que al final conseguimos hacer entrar al ratón de nuevo en el baño y cerrar la puerta dejándolo dentro.

Cementerio de San Juan, "atravesado" por la carretera principal... al ratón casi lo mando aquí de un "chanclazo" o_0
¿Y ahora qué? Hemos vuelto al punto de partida. Insistí con mi plan inicial, pero Paco tenía sus propios planes. Echó un vistazo alrededor, y aprovechando que yo me encontraba fuera en el pasillo, echó mano de  mi colchón (sí sí, ¡el mio!, ¡aún me dura la indignación! :-p) y en menos que canta un gallo había montado una barrera desde el baño a la puerta de la habitación para "indicarle" el camino de salida a nuestro Micky Mouse particular. De nada sirvieron mis súplicas... ni mis amenazas (¡en ese colchón vas a dormir tú!)... Paco abrió la puerta del baño y el dócil ratón abandonó el redil, cual toro que entra en la plaza...
...Sobra decir, que a la mañana siguiente hicimos check out ;)

piscinas naturales de San Juan, en la isla de Siquijor. De camino a nuestro nuevo alojamiento sin "ratones saltarines"...

2) Una de polis y cacos
¿Qué ocurre cuando uno lleva más de siete meses de viaje y llega a un lugar donde lo más interesante que allí ocurre es la presencia de uno mismo? ¿a un lugar tan pequeño y familiar donde todo al que te cruzas te sonríe y te saluda con un "hi, Lara"? Pues que uno se relaja y baja la guardia... vamos, que nos tenían que robar para poder ser unos auténticos viajeros de pro. Y eso es lo que nos pasó en las cascadas de Cambughay, en las cercanías de Lazi.

un tercio de la población de San Juan son de estas ;-)

y otro tercio son gallos... el tercio restante son los que se sabían mi nombre, jeje
Dejamos la mochila en la orilla, y nos metimos a bañarnos, echándole una ojeada de vez en cuando a la mochila. Allí sólo había familias y chavalillos, pero nada que pareciese ser una amenaza potencial. Nos equivocamos, y en un momento de despiste, debieron de aprovechar para abrirnos la mochila, buscar la cartera, vaciarla de billetes, cerrarla, dejarla en su sitio y volver a cerrar la mochila.


cascadas de Cambughay, cerca de Lazi, en la isla de Siquijor
No nos dimos cuenta hasta que horas más tarde fuimos a pagar unos bollos en una panadería de Siquijor pueblo, y al abrir la cartera descubrimos sorprendidos que no había dinero. Por suerte no se llevaron las monedas, con las que nos llegó para pagar medio litrillo de gasolina y poder regresar a casa ;).

La verdad es que la suerte fue mucho más que eso. No llevábamos mucho metálico encima (el equivalente a unos 30€), pero sí un par de tarjetas de crédito, los pasaportes, las dos tabletas, la cámara de fotos y el móvil. ¡Menos mal que sólo decidieron llevarse el metálico!, porque por poder... ¡uff, no quiero ni pensarlo!
El caso es que el hurto nos dio la excusa perfecta para ir a visitar a la policía :-). Y aquello fue como entrar en un cómic de Mortadelo y Filemón. ¡Imaginaos la "profesionalidad" de aquel cuartelillo, que según salimos por la puerta lo primero que nos dijimos el uno al otro fue ¿habrán encestado en la papelera o se les habrá caído fuera?!

El resto del camino de vuelta a casa nos lo pasamos partiéndonos la caja con las absurdas teorías del que parecía ser el jefe: Tenemos dos opciones ma'am: 1) que os hayan robado o 2) que los billetes se hayan caído fuera de la cartera... Y yo creo que se contuvo de decir "y 3) que os lo hayáis gastado y no os hayáis dado cuenta" :-p

De nada sirvió explicarle (y enseñarle) que la cartera se abría primero con un velcro y después con una cremallera (donde se guardan los billetes). Y que ésta a su vez, se encontraba dentro de la mochila, que requería la apertura de otra cremallera más. El hombre erre que erre, que existía la posibilidad de que se nos hubieran "caído accidentalmente" los billetes y por tanto los hubiésemos perdido. Eeeehhh, yes, sir, yeeeeees, tuve que acabar contestándole mientras trataba de disimular la carcajada.

llegando a la playa de Kagusuan, no muy lejos de las cascadas donde nos robaron :'(
Antes de irnos, todavía le dio tiempo a añadir una última cosa. Estaba bien que hubiésemos ido a su comisaría (en Siquijor pueblo), donde se iban a hacer cargo del "registro del suceso" (¡ni siquiera me preguntaron la hora, y con suerte que les dije yo el lugar!) y posterior comunicación a la comisaría de Lazi (pues las cascadas son jurisdicción de la policía de aquel pueblo). También harían el seguimiento, peeeeeero, nos recomendaban encarecidamente que fuésemos a Lazi a poner la denuncia. ¿Cóoooomo? ¿qué diferencia puede haber entre que vayamos allí a ponerla o no? ¿de verdad es necesario que crucemos la isla entera hasta aquel pueblo cuando aquí ya se encargan del "registro, comunicación y seguimiento"? Si apenas nos queda gasolina para llegar a casa estando aquí al lado ¿cómo quieren que nos vayamos a la otra punta de la isla cuando está empezando a anochecer y sin dinero para llenar el depósito? ¡Una situación surrealista total! (Por si alguno se lo está preguntando: no fuimos)
 
3) No hay bien que por mal no venga
Lo sé, lo sé. El refrán es al revés. Pero a mí me gusta más está otra versión ;-)
¿Que cuál fue el "mal" en esta ocasión? Pues que el día que fuimos a abandonar la isla, nos encontramos con que el único ferry del día estaba completo y no habría otro hasta dos días más tarde. ¿Realmente nos importaba? Pues para ser sinceros, no mucho. Esta es la clase de imprevistos que te trastocan un poco los planes, pero que en el fondo te dan un poco igual (cuando vas con tiempo, claro. Porque hubo una pareja de franceses a los que no les hizo mucha gracia perder su vuelo de regreso a Europa del día siguiente por no poder viajar a Cebú esa noche :-s)

El ferry hoy está lleno... habrá que quedarse en tierra :-s
Nosotros en cambio, nos lo tomamos con calma y decidimos quedarnos en el pueblo de Larena (donde estaba el puerto) y explorar un poco más esa zona de la isla. Y fue aquí donde vino el bien ;-). En uno de nuestros "paseos exploratorios" por una zona por la que (luego supimos) habitualmente no pasa ni el tato. Y esto lo supimos porque nos lo contó Axel, el carpintero alemán al que conocimos por casualidad y con el que acabamos pasando el resto de la mañana y la mitad de la tarde.

Puerto de Larena, isla de Siquijor.

una de las playas que encontramos en nuestro "paseo exploratorio" poco antes de conocer a Axel.
Imaginaos la situación: nosotros dos paseando por un camino entre cocoteros, de repente una casita, y un occidental intentando arrancar una moto:

- Good morning!
- Hi! Where are you going?
- Nowhere, we are just walking
- Just walking? Do you want a beer?
- Yep, why not? Let's take a beer! =)

Y allí, en medio del bosque, a tan solo unos metros de su casa, Axel se había construido una barra de bar, con sus taburetes, su equipo de música, su nevera y sus jarras de cerveza que pronto tuvimos llenas y en la mano mientras brindábamos por las casualidades de la vida.

Paco en la barra del Check Point Charlie, el "bar" construído por Axel.
La verdad es que el tipo era todo un personaje. Nos contó su vida y nos siguió rellenando la jarra de cerveza fresquita cada vez que la veía vacía. Esa noche debió de dormir calentito porque entre lo que bebió con nosotros y lo que debía de llevar ya de antes, llegó un punto en que no veía ni su jarra! Nos lo pasamos muy bien aquel día, y nos invitó a ir al día siguiente a bañarnos a la piscina del resort que estaba construyendo con unos amigos suizos. La pena fue que al día siguiente se levantó lloviendo y ya no paró hasta que dejamos la isla, por lo que no fuimos al resort :'(

Lo que sí hicimos al día siguiente (por recomendación de un local), fue levantarnos a las seis de la mañana para ir a "pedir la vez" en la taquilla de venta de billetes para el ferry. Como no venden billetes por adelantado, la gente lo que hace es ir temprano, escribir en un papel su nombre, la clase en que quiere viajar y el número del orden en que ha llegado. El papelito, lo cuelan por debajo de la ventanilla de venta y se van a casa para volver a las 9:00 que es cuando abren la taquilla. Eso hicimos nosotros y así conseguimos nuestros billetes. Y colorín colorado, ¡se acabó el estar atrapados! ;-)

en las "claustrofóficas" cuevas de Cantabon (en el interior de la isla de Siquijor). Aquí sí que se siente uno "atrapado" ;-)
  
INFORMACIÓN PRÁCTICA PARA VIAJEROS

- Transporte: para llegar a la isla de Siquijor desde la isla de Negros, en la ciudad de Dumaguete hay varias compañías que operan esa ruta. La más económica es GL Shipping Lines, con seis barcos rápidos diarios por 120 PHP (5:45, 8:45, 10:00, 12:00, 16:00 y 16:30). El puerto de destino con esta compañía es Siquijor pueblo (otras compañías te dejan en el puerto de Larena, a unos 12 km de Siquijor pueblo).
Los triciclos en el puerto de Siquijor tratarán de vender sus servicios por 250 PHP, así que es mejor alejarse un poco y coger uno en la carretera. El trayecto Siquijor - San Juan, o Siquijor - Larena sale por 20 PHP.
De todos modos, la mejor manera para moverse por la isla, es alquilando una moto. Tanto en Siquijor como en San Juan se pueden alquilar motos por unos 300 PHP al día (precio oficial sin negociar; negociando se puede sacar por menos), o por 20-25 PHP la hora. En Larena salen un poco más caras.
Para ir a la isla de Bohol desde la isla de Siquijor, hay ferries desde Larena (Lite Shipping Corporation; Martes, Jueves y Domingos, de 19:00 a 22:00; 220 PHP sentados o 280 PHP en litera + 17 PHP de tasa de puerto; no venden por adelantado y se suele llenar, así que es recomendable ir temprano a sacar el billete - abren la taquilla a las 9:00-) y desde Siquijor pueblo (OceanJet; diario de 6:00 a 9:00 y de 14:30 a 17:30; por 600 PHP + la tasa del puerto).

- Alojamiento: nosotros nos alojamos en las cercanías de San Juan (zona este de la isla; con unas puestas de sol increíbles).
El Czar's Place (Maite, San Juan; czarsplace@yahoo.com; +63-920-236-7004; +63-917-323-0858; +63-916-310-4810) queda a unos 8-10 min andando desde San Juan en dirección a Lazi. La habitación doble (exterior y con mosquitera en las ventanas) con baño privado y ventilador la pagamos a 500 PHP la noche (de la tercera noche en adelante nos lo bajaban a 400 PHP, pero nos cambiamos al Casa Miranda). Habitación muy amplia y luminosa; no muy limpia. Tiene bar y restaurante, así como piscina. Los Viernes tocan música en vivo. Muy buen ambiente. Alquilan motos (300 PHP el día entero; no alquilan por horas). Sin WiFi.
El Casa Miranda (Lalao, San Juan; +63-905-943-0536) queda a unos 15 min andando desde San Juan en dirección a Siquijor pueblo. La habitación doble (exterior y sin mosquitera en las ventanas) con baño privado y ventilador la pagamos a 250 PHP por noche. Habitación pequeña pero más limpia que en el Czar's. Con cocina de uso comunitario. Junto al mar. Alquilan motos (día entero 250 PHP o 20 PHP la hora). Con WiFi.
En Larena, hicimos noche en el Luisa & Sons Foods & Lodge (justo en el puerto). La habitación doble (exterior y sin mosquitera en las ventanas), con baño compartido y ventilador la pagamos a 250 PHP por noche. Sin WiFi. Bastante cutrillo, pero la familia era encantadora. Muy ruidoso por la noche (se oyen todos los karaokes del puerto) y con visitantes nocturnos que te "mordisquean" el pan de molde...

- Comida: en San Juan no hay mucha variedad, aunque sí se pueden encontrar 4-5 eateries donde comer (normalmente con poca cosa y muchas veces con aspecto de llevar varios días cocinado). Están en el mercado (donde también hay un puestecillo de pollos asados) o en la carretera, pasada la curva de las piscinas naturales. Nosotros fuimos varias veces a uno muy cercano al Casa Miranda, dirección a Siquijor pueblo, en el mismo lado izquierdo de la carretera. Las cenas las hicimos la mayoría en casa, pues teníamos cocina. En San Juan hay varias tiendecitas y el mercado donde se puede encontrar pasta/arroz y alimentos frescos (a veces no demasiado) para cocinar uno mismo. También hay un par de bakeries.
En Larena, Siquijor pueblo o Lazi, hay mucha más oferta y variedad.

puesto callejero de venta de pescado fresco en San Juan, isla de Siquijor.
- Otros: como a 1,5-2 km al norte de Larena, saliéndose de la carretera principal por el lado de la izquierda, se llega al Check Point Charlie, el "bar" que se ha construido Axel junto a su casa. Si pasáis por allí, id a verle (preguntad a los locales, ellos os guiarán si no lo encontráis). Le encantará vuestra visita y seguro que pasaréis un buen rato. Decidle que vais de parte de los hermanos españoles que se encontró en Enero y que iban "just walking" ;-)